Sentimientos ocultos de la maternidad

Las primeras semanas de vida de un bebé son el trabajo más arduo que jamás hayas hecho, implica un cambio total en tu ritmo de vida. Sentirás que pasas todo el día atendiendo al bebé, dormirás poco y esto te llevará a estar muy cansada. Además de esto habrás pasado por cambios hormonales fuertes que te pondrán sensible. Es normal que ante todos estos cambios en algún momento te sientas frustrada, sobrepasada, cansada, fastidiada y preguntándote ¿Qué es lo padre de ser madre? ¿Será que yo no estoy diseñada para ser madre?, etc.

Estos cuestionamientos y sentimientos “negativos” te llevan a sentirte culpable y estará en contraposición con los comentarios que las visitas pueden hacer “Ser mamá es la mayor bendición del mundo”, además de toda la idealización que existe acerca del amor materno.

Para tu sorpresa, la mayoría de las madres pasamos por estos momentos, así que no te sientas culpable, solo necesitas descansar, tomarte un breve respiro para seguir adelante y permitir que con el paso de los días te vayas “enamorando” de tu bebé. Al cabo de unas semanas te irás adaptando a estos cambios y te sentirás mejor. No confundas estos sentimientos con la depresión postparto. Si te es posible asiste a algún grupo de apoyo de lactancia y convive con otras madres que estén pasando por la misma situación, te darás cuenta de que es muy normal sentirse sobrepasada y que pronto todo mejorará.

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